Tres aspectos básicos del Tai Chi Chuan

El Tai Chi Chuan (o “meta suprema del arte marcial”) en sus inicios era un arte marcial, pero a medida que fue evolucionando, con las aportaciones personales de todos los maestros, fue desarrollándose en tres áreas básicas: autodefensa, terapia y filosofía-meditación.

La autodefensa está basada en la aplicación de las posturas o transiciones de la forma. Cada postura tiene varias aplicaciones marciales de combate. Un libro clásico donde se explican las aplicaciones marciales es “La canción de las 13 posturas” (1900).

La terapia, quizá sea el área más conocida en la actualidad, emerge como tal tras conocer con la práctica sus efectos sobre la salud y la longevidad. Muchos estudios actuales, respaldan la teoría de que ayuda a equilibrar y a mantener el Qi corporal. Busca el equilibrio energético a través de la disolución de los bloqueos y de la tensión, por medio de movimientos suaves, lentos y relajados; y a la vez, tonificantes. Puede ser considerado como una terapia holística, útil para aliviar cualquier tipo de afección física y psíquica. Trabaja con la respiración todo el circuito energético: cuerpo y mente. En el cuerpo estabiliza los dos hemicuerpos, ambos hemisferios cerebrales, el equilibrio y la coordinación. En la mente, favorece un estado de tranquilidad y paz, aumentando la concentración. Los principios energéticos sobre los que se basa son los mismos que los de La Medicina Tradicional China. Un libro clave para su profundización es “Canon de Medicina interna del Emperador Amarillo”.

La meditación trabaja con el control consciente de la mente, para llegar al “vacío”, al “Wu qi”, que es el estado de inteorización donde impera la claridad mental. En etapas superiores de trabajo se convierte en una meditación en movimiento. Esta “alquimia interna”, como también se le conoce, es una escuela de pensamiento china que influyó en la terapia y en la filosofía. Se basa en la transformación de nuestra energía por medio de la visualización, concentración mental y respiración. En la alquimia interna se trabaja la terapia y la meditación para refinar la energía (casi siempre a partir de posturas estáticas de meditación). Unos libros interesantes son: “El secreto de la flor de oro”, “Tao Te King”, “Lie-Tse”.

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